Las bodas están llenas de simbolismos, desde el vestido de la novia, hasta la decoración del pastel de boda. Todas las parejas desean que su celebración sea única y especial y una manera de darle un toque personal puede ser haciendo un ritual que selle vuestro amor de una manera más íntima y mágica.
Estos ritos son acciones simbólicas, representaciones del amor y de la voluntad que enlaza una pareja. Pueden acompañar una ceremonia civil, o incluso a la religiosa, si la creencia de la pareja no se opone.
Cada pareja tiene sus símbolos, su lenguaje, su estilo… Por ello, quizás te sientas identificado con algunos de estos rituales y quieras incluirlos para personalizar tu boda.
Rito de la luz
Para este rito se necesitan 3 velas: dos pequeñas que sostendrán los novios, que representan sus vidas individuales y una grande que estará colocada entre ambos. La manera más común es encender las velas pequeñas y usar sus llamas para prender la vela grande juntos. Este rito simboliza la llama del amor eterno y el inicio de su nueva vida en común.
Rito de la Arena
Probablemente uno de los más conocidos y que tiene su origen en las antiguas bodas hawaianas celebradas en la playa. Los novios usaban la arena procedente de sus lugares de origen y las mezclaban como símbolo de amor eterno, imposible de separarse.
Se trata de una ceremonia muy sencilla que consta de tres frascos de cristal, de los cuales dos contienen arena de diferentes colores. Los novios la vierten en un recipiente mayor de forma que los finos granos de arena se mezclen y no podrán volver a separarse, del mismo modo que lo harán los cónyuges.
Ceremonia del vino
Es ideal para los amantes del vino. Cada novio porta con un decantador: uno con vino tinto y otro con vino blanco, los preferidos de los cónyuges. Al igual que el rito de la arena, ambos se vierten en un recipiente de mayor tamaño, de forma que acoge la mezcla de ambos. A continuación, el oficiante les sirve una copa para que degusten su propia mezcla.
Ceremonia de la unión de manos.
Se trata de un rito de origen celta. Es un ritual basado en la unión de manos y la promesa espiritual de mantener esa unión durante el tiempo que perdure el amor.
Los novios entrelazan sus manos (la derecha de uno con la izquierda del otro), formando el símbolo del infinito. El oficiante las ata con una cuerda o lazo. Como curiosidad, esta ceremonia no termina con la frase “Hasta que la muerte los separe”, sino con “mientras dure el amor”, es decir, si el amor se acaba, cada cual es libre de seguir su camino.
Ritual del candado
Esta ceremonia viene de la costumbre de colocar candados con las iniciales de los novios en algunos puentes de ciudades, pero para la boda sustituiremos el puente por otro tipo de soporte como un marco. Es un ritual que simboliza la unión y el compromiso. Pueden usarse uno o dos candados
Un solo candado simboliza vuestro matrimonio y se bloquea entre los dos como señal de compromiso y la llave puede tirarse a un lugar que sea especial para ambos. Dos candados simbolizan a cada uno de los novios que al bloquearlos se unen en matrimonio para siempre. En este caso podéis guardar la llave el uno del otro como señal de confianza y fidelidad.
Ceremonia de la rosa
Los novios se intercambian dos rosas de tallo largo y las depositan en un jarrón. Se hará lo mismo en cada aniversario de boda para recordar a la pareja que su matrimonio está basado en el afecto y la pasión. Es vuestro primer regalo como casados, por lo que puede ser una buena idea regalar algo relacionado con esta ceremonia a los invitados.
Rito del nudo marinero.
Se trata de una antigua tradición irlandesa, donde la novia y el novio atan un nudo marinero con un lazo o una cuerda para simbolizar un vínculo que, en lugar de romperse bajo presión, se vuelve más fuerte, formando un vínculo de ahora y para siempre.
Cápsula del tiempo.
Consiste en una caja o baúl, donde se pueden poner objetos importantes de su relación, votos matrimoniales donde se expresen los sentimientos el uno sobre el otro o cualquier cosa que sea especial para los novios. La caja se abrirá cuando ambos pacten una fecha y así recuerden lo que sentían el día de su boda.
Plantar vida.
Si te vas a casar, considera plantar un árbol o una flor favorita. Con este gesto se muestra el amor entre ambos y por la naturaleza. Es un reflejo de la relación que simboliza las raíces hasta el matrimonio y el crecimiento de esta durante los años para que crezca fuerte y resistente, superando las tormentas que pueden entrar en su vida y salga indemne, que supere el paso del tiempo y se nutra uno del otro para que ambos juntos puedan alcanzar su máximo potencial.
¿Qué os parecen éstas propuestas? ¿Haríais algo así para vuestra boda? ¿Conocéis algún otro ritual?